domingo, 28 de abril de 2013

Circular Almendrón - Navachica - Cielo


Distancia: 21,68 Km
Tiempo: 8 h 6'
Altitud máxima: 1.832 m
Altitud mínima: 419 m
Desnivel acumulado: 1.777 m
Dificultad técnica: Difícil
Track: Wikiloc

No creo que fuera por resarcirme del fiasco de hace 3 días, ni por como dice "Fran de Cádiz" dejar de ser tan dominguero y salir también otros días de la semana. El caso es que mientras desayunábamos el miércoles por la mañana Natalia me dijo: " ¿no daban lluvia para hoy?, pues el cielo está totalmente despejado. ¿Por qué no aprovechas y te vas al monte? ". Imposible decir que no.

Así que sin darle muchas vueltas, cogí unos geles, un par de barritas y 3 litros de agua y todo a la mochila y un rato más tarde ya estaba de nuevo preparándome para empezar a andar en el Área Recreativa del Pinarillo.


Que diferente se ven las cosas a plena luz del día. Cuando el domingo pasé por aquí aún eran las 7:00 de la mañana y no se veía nada y ahora me encuentro este pico delante de mi. ¿Será el Almendrón?


No lo sé, lo mejor será ir caminando y ya veremos. Mientras tanto... ¡A disfrutar del camino!.


Al poco rato vuelvo a pasar por el cortijo de la Fuente del Esparto, donde aprovecho y meto la gorra en el agua. Como haga este calor todo el día me voy a achicharrar.


A medida que voy avanzando dos grandes barrancos se abren ante mi. Creo que son el Barranco de los Cazadores y el Barranco de la Higuera.


Que barbaridad, pensar que la idea es rodearlos por detrás... menuda panzada de andar me voy a pegar.

Un poco más adelante aparece al fondo, esta vez si, la cima del Almendrón, la primera de las tres montañas que quiero subir hoy.


Parece que está a tomar por c..., un poco lejos, pero no importa, mi ritmo es de casi 4 Km/h así que si me olvido de adonde voy y me centro en donde estoy me plantaré en la cima antes de darme cuenta. Y la verdad es que el sitio donde estoy bien merece la pena que lo disfrute.


Pero sin bajar la guardia, porque parece ser que la ruta en sí es bastante "peligrosa".


Cuando dejo la pista forestal para seguir por la vereda... no me extraña que el domingo acabara chorreandico.

Con todas estás plantas empapadas de rocío lo raro habría sido que no me mojara. Sin embargo en esta ocasión lo que me voy llevando pegado a la ropa es el olor del romero.


Un poco más adelante de donde me volví la última vez la vegetación se abre un poco y puedo empezar a disfrutar del panorama. Al fondo se ve El Cielo, el 3er pico que quiero subir hoy.


Un poco después llego a un collado a través del cual me paso a la vertiente NO de la ladera que voy subiendo y desde donde se abre una bonita vista de la costa de Nerja.


Y tras ascender por una barranquera muy incómoda y plagada de aulaga que me deja como si me hubiera peleado con un gato llego al que quizás es el mirador más espectacular de toda la ruta.


El Barranco de los Cazadores se abre ante mi, con sus altos precipicios a cada lado.


Por supuesto que estas patatas de fotos que hice no están a la altura de la belleza del paisaje.


Así que aunque llevo un Kamelback decido parar a echar un trago y darme un homenaje con estas vistas.

Aunque al poco de ponerme en marcha otra vez me encuentro con la espectacular cima del Almendrón. ¿Por donde se subirá ahí arriba? Seguro que no será tan difícil como parece.


Aunque cuanto más me acerco mas impresiona...


Lo rodeo por el SO y tras dejar los bastones donde empieza la trepada, me voy abriendo camino por donde buenamente puedo y por donde veo que las rocas se mueven menos. Hasta que ya no queda nada más alto a lo que subirme.


Entonces un precipicio que me hace sentir muy pequeño se abre ante mi. Son los Tajos del Sol.


Que barbaridad de tajo, solo se me ocurre pensar una cosa... ¿se podrá subir por ahí? :-)

Tras disfrutar unos minutos de la cima me dispongo a bajar de aquí solo para darme cuenta que por este lado la bajada es mucho más fácil.


Lo único malo es que de todas formas tengo que ir a buscar los bastones donde los dejé. Que tonto soy, la próxima vez los echo a la mochila. 

Casi sin darme cuenta el cielo se ha ido cerrando, eso está bien,  porque así no me achicharro, pero aún me queda toda la cuerda que se ve en el horizonte unos 14 o 15 kms. Parece que una vez más me voy a mojar.


Como ya he pasado la zona con mayor desnivel decido ir trotando un poco para ganar algo de tiempo, a ver si con un poco de suerte me libro de la ducha. Además, el terreno es bastante llano y de presta a ello.


Y hasta llegar a la cima del Navachica voy alternando tramos corriendo y tramos caminando.


Esta cima es un poco feilla, la verdad, sobre todo comparándola con la del Almendrón, pero la parte buena es que parece que el cielo se ha vuelto a abrir un poco.

Lo que yo no sabía es que lo que estaba siendo un bonito día de montaña se iba a convertir a partir de aquí en una pesadilla. Una vez en el eje geodésico abro un gel y le pego un buen trago, pero me sabe raro y la textura... no sé, no sé. Lo miro... no importa, es de platano y manzana, será eso, una mezcla rara. Le doy otro trago y me sabe aún peor. Vá, lo dejaré en la mochila como último recurso, voy a seguir trotando un poquito que esto es llano y para abajo. Solo es seguir la cuerda hasta el pico del fondo, que es el Cielo.


A los pocos minutos el estomago me empieza a dar botes, bueno, igual es mejor dejar de correr y solo caminar deprisa. Pero cuando empiezo a subir la primera de las lomas de la cuerda...


 me empiezo a sentir fatal, las piernas no tienen casi fuerza y me siento un poco mareado tanto que... empiezo a vomitar. Oh, que horror, odio vomitar. ¿Que me está pasando? si hace 15 minutos estaba perfectamente, llego de energía... se me ocurre mirar el sobre del gel y... 03.12... mierda!, lleva caducado más de un año.

¿Que hago? ¿me vuelvo por donde he venido?... No, solo de ver el sube y baja que me queda hasta el Almendrón y luego otros 7 Kms hasta el coche...


¿Sigo adelante?... El cielo que aún muy lejos, pero el recorrido es más llano y luego es una bajada de unos 4 o 5 Kms. Eso es lo que haré. 

La verdad es que me encuentro fatal, vuelvo a vomitar un par de veces más, la garganta me escuece y me duelen el estómago, la cabeza y las piernas van sin fuerza. Decido centrarme en avanzar aunque sea pasito a pasito. Procuro beber mucho para hidratarme bien pero los siguientes 4 Kms me llevan 3 horas.


Aunque hace sol tengo bastante frío, mi aspecto es patético, más que andar me voy arrastrando, parezco un borracho y parece que no avanzo. Esto es horrible.


Llego a una zona en la que parece que el paisaje empatiza con mi estado físico... desolado, acabado, sin vida.


Por esta zona solo recuerdo que me encontraba como el culo, que en lo único que me podía centrar era en dar un paso detrás de otro y que si decidía pararme a descansar luego me iba a costar mucho más ponerme de nuevo en marcha.


Sabía que en la cima del Cielo había cobertura y solo pensaba que cuando llegara allí pararía unos minutos para llamar a Natalia y decirle que iba a llegar un poco más tarde de la cuenta. 

Lo bueno que tiene dar un paso detrás de otro es que te acaban llevando a algún sitio y cuando de pronto apareció ante mi la cruz que señala el punto más alto del pico del Cielo sentí un gran alivio.


Me senté unos metros bajo la cumbre pero suficientemente alto para tener cobertura, llamé a Natalia y me tomé media barrita muy despacio y con mucha agua. Ojalá no la vomite también.

No creo que estuviera allí sentado más de 10 minutos, pero cuando me puse en pie de nuevo me asusté. Todo me daba vueltas, me temblaban las manos y las piernas. Una autentica piltrafa humana. ¿Que hago? pues que voy a hacer, dar un paso tras otro. Todo era cuestión de llegar al fondo del barranco, pero el barranco esta 1.100 metros más abajo y 4 o 5 Km las lejos.


Un cuarto de hora más tarde miro el GPS y descubro que solo he avanzado 200 metros. Esto es horrible, estoy hundido, pero no puedo seguir así, tengo que quitar de mi cabeza este estado mental tan negativo que me está machacando. ¿Me pongo música? solo de pensar en agacharme y buscar el móvil y los auriculares en la mochila me dan ganas de vomitar de nuevo. Pero tengo que pensar en otra cosa. Así que me pongo a contar del 1 al 100 en alemán. Al principio me siento ridículo, pero cual será mi sorpresa que cuando voy por el setenta y pico voy poniendo voces raras, como medio de coña, que guay, eso significa que estoy más animado, incluso suficientemente animado como para hacerme una autofoto...


... que solo me sirve para ver que penica doy :-)

Unos minutos después se me han quitado las nauseas y noto como las piernas se van moviendo con más alegría, incluso empiezo a levantar la vista del suelo y vuelvo a contemplar el paisaje.


Creo que ha llegado el momento de terminarme esa barrita que dejé a la mitad. 


Este pequeño aporte de energía me sienta genial. Como llevaba 3 litros de agua no he parado de beber incluso sin sed y cada vez me siento mejor. Me doy cuenta de que lo peor ya a pasado y sin querer, ese tonillo tonto que le estoy dando a la lista de números en alemán se acaba convirtiendo en una canción de... Estopa !!! Parece mentira, hace media hora me estaba muriendo y ahora voy cantando entre las flores... cualquiera que me vea...


En una hora más recorro los últimos 4 kilómetros que me llevan por el Barranco de la Colada hasta la pista forestal que lleva al Pinarillo.


Por donde acabo incluso trotando un rato plenamente recuperado.


La verdad es que solo pude disfrutar de la subida al Almendrón y de la bajada desde el Cielo, pero seguro que la ruta bien merece la pena. Siempre y cuando no seáis tan tontos de alimentaros con comida caducada hace más de una año. Si es que... ¿a quien se le ocurre? :-P

domingo, 21 de abril de 2013

1º Intento a la circular Almendrón - Navachica - Cielo.


Distancia: 7,56 Km
Tiempo: 1h 50'
Altitud máxima: 862 m
Altitud mínima: 460 m
Desnivel acumulado: 529 m
Dificultad técnica: Moderada

Después de la grata experiencia del la subida al Cerro Lucero  de hace dos semanas, me decidí a levantarme otra vez de madrugada para dar otro paseo por la Sierra de la Almijara. En esta ocasión la idea era hacer la circular que tiene como punto de inicio y de final el área recreativa de El Pinarillo y pasa por los picos de El Almendrón, El Navachica y El Cielo.

Así que con este plan me planto a las 7:00 de la mañana en El Pinarillo para empezar a caminar.


Todo pintaba de maravilla durante los primeros metros de recorrido. El track que llevo, de un tal CarlosGPS, es muy bueno, y cada vez que hay un desvío raro lo tomo sin problemas (como quiero a mi GPS). Además voy disfrutando de las primeras luces del día y del sonido de los pájaros.


Hoy iba yo muy bien dispuesto, incluso me acordé de ponerle la batería a la cámara y no me la dejé en el cargador como la última vez. Una genialidad por mi parte.


A poco más de un kilómetro de recorrido llego a una construcción que no sé muy bien que será...


... y junto a ella la famosa Fuente del Esparto.


La verdad es que esperaba algo más que un simple caño en un pilón, eso me pasa por crearme expectativas. En fin, que voy siguiendo mi camino por una pista forestal bastante cómoda y poco después de la fuente, un jabalí cruza corriendo el camino unos 20 metros delante mía, que susto me pegué !!! Decidí ir haciendo algo de ruido por si había más que me oyeran y así evitar encontrarnos de sopetón. Para el que no lo sepa, estos bichos son bastante más listos que los hombres y aunque pueden matarnos sin muchos problemas solo usan la violencia como último recurso y sólo para defender a sus crías.


Así iba yo haciendo fotos a lo que tenía por delante y a lo que iba dejando por detrás.


Cuando voy notando como de vez en cuando algo me va mojando las perneras de los pantalones, la hierba del camino está empapada por la humedad de esta niebla que lleva tres días en la zona y aunque la pista es ancha a veces hay algunas plantas en el camino y esas son las que me están mojando.



El problema empieza cuando a partir del kilómetro 2,5 hay que tomar un sendero muy estrecho y lleno de vegetación.


A los pocos metros de empezarlo, los arbustos cierran completamente el camino todo está más o menos así de mojado...



Cinco minutos más tarde estoy empapado de cintura para abajo, los pantalones se me pegan a las piernas chorreando un agua que me inunda las zapatillas, así que llevo los calcetines y los pies como si los hubiera metido en una piscina. Todos sabemos lo agradable que es caminar así. Intento seguir un poco más a ver si el camino se abre un poco, pero muy al contrario ahora tengo que pasar por una zona de pinos que me mojan también el forro polar y la mochila. Creo que no es una buena idea caminar otras 5 o 6 horas de esta guisa, lo más seguro es que acabe acatarrado y con ampollas en los pies, así que decido darme la vuelta.


La bajada por el mismo camino termina por mojarme tanto los pantalones que se me empiezan a caer del peso del agua, un autentico desastre. Que pena, el paisaje es precioso y la ruta promete. Estoy seguro que volveré a intentarla. Eso si, cuando no halla tanta humedad.


Mientras tanto, en vez de con el recuerdo de ir empapado y con frío prefiero quedarme con esta otra imagen mucho más agradable.